Simone Biles ha vuelto.
La súperestrella estadounidense de la gimnasia artística planea retornar a las competencias a inicios de agosto en una justa a las afueras de Chicago, su primera desde los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, solo que se disputaron en 2021.
La Federación Estadounidense de Gimnasia anunció el miércoles que Biles, siete veces medallista olímpica y campeona olímpica en 2016, formará parte del elenco femenino de la justa de un día que se escenificará el 5 de agosto en la arena NOW en Hoffman Estates.
Biles se alejó los últimos años tras su participación en Japón, donde su decisión de retirarse de múltiples eventos para concentrarse en su salud mental alteró el enfoque de los Juegos, volteándose hacia el bienestar de los atletas.
Animó a sus compañeras estadounidenses que ganaron la presea de plata en la prueba de equipos, y declinó competir en las finales del all-around, el potro y ejercicios de piso. Reveló que padecía de los «twisties» — un término de la gimnasia que alude a un bloqueo mental que hace que los gimnastas pierdan el control de sus cuerpos mientras están en el aire.
Biles reapareció para la final de la barra de equilibrio, llevándose una medalla de bronce que le permitió empatar el récord de Shannon Miller de más preseas olímpicas por parte de una mujer estadounidense en la gimnasia olímpica. Ha insinuado que podría ir a los Juegos Olímpicos de París 2024, pero sólo tras una prolongada pausa.
Y ha tenido dos años muy movidos. Fue la figura principal de una gira de eventos en el otoño de 2021 y se casó esta primavera con Jonathan Owens, un jugador de la NFL que se desempeña como defensor de los Packers de Green Bay.
Biles, de 26 años, se ha convertido también en una de las principales voces para que los atletas cuiden su salud mental luego que su experiencia en Japón le puso en el centro del debate.
Aunque la discusión sobre el tema es cambiante, el retorno de Biles al deporte que dominó por una década sugiere que quiere despedirse del mismo con sus propios términos.
AP